25 abril, 2025

Chancay crece hacia el mar, pero se estanca en tierra

Chancay crece hacia el mar, pero se estanca en tierra

El megapuerto de Chancay se alza como símbolo de modernización frente a un entorno marcado por la precariedad en infraestructura y planificación urbana. A pesar de representar una inversión superior a los US$3.200 millones en capitales chinos, el contraste con la realidad local es evidente: mientras el puerto mira al mundo, el distrito aún espera mejoras fundamentales.

Chancay, con cerca de 64.000 habitantes —una cifra que podría triplicarse en la próxima década—, cuenta con un presupuesto per cápita que no supera los S/1.000 anuales, según cifras del MEF e INEI al 2023. Esta cifra es considerablemente baja si se compara con otros distritos que manejan entre S/2.000 y S/12.000 por persona al año. Esta desigualdad refleja una urgencia de repensar la distribución de los recursos públicos a medida que la zona se convierte en un nuevo polo logístico del país.

El desarrollo urbano también enfrenta limitaciones críticas. Aunque se ha diseñado el Plan de Desarrollo Urbano de Chancay 2024-2034 con el objetivo de guiar una transformación estructural de la ciudad, su aprobación oficial sigue pendiente. Esto impide a las autoridades locales emitir permisos para actividades industriales en más de 7.000 hectáreas destinadas a expansión urbana, restringiendo así la llegada de inversiones clave.

Uno de los mayores desafíos ambientales es la falta de tratamiento de aguas residuales: actualmente, el desagüe doméstico se vierte directamente en el mar, afectando al ecosistema y poniendo en riesgo la salud pública. La ejecución de una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales resulta urgente para revertir este problema y acompañar el crecimiento urbano de forma sostenible.

En paralelo, algunos avances comienzan a concretarse. La creación de una aduana en el puerto ha permitido que Chancay acceda a rentas aduaneras, al igual que lo hace el Callao. Asimismo, una reciente ley aprobada por el Congreso destina el 20% de esos ingresos a un fondo social local. Aunque el monto inicial —S/3,7 millones— es aún limitado, existe un alto potencial de crecimiento si las proyecciones logísticas se cumplen.

Para hacer realidad la promesa de desarrollo que el megapuerto representa, será vital una coordinación efectiva entre el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, el gobierno local de Huaral y otras entidades clave. Solo un enfoque integral y articulado permitirá que el progreso portuario se refleje también en la calidad de vida de la población.

SUSCRÍBETE AL BOLETÍN

NUESTRO DIRECTORIO ESPECIALIZADO

AUSPICIADORES









OPORTUNIDADES