El ministro de Transportes y Comunicaciones, César Sandoval, deberá aclarar públicamente los motivos detrás de la reciente implementación de la Tarifa Unificada por Uso de Aeropuerto (TUUA) para pasajeros en tránsito en el nuevo terminal del aeropuerto Jorge Chávez. Esta tarifa se aplicará tanto a vuelos nacionales como internacionales y será de US$7,07 y US$11,32, respectivamente. Su inclusión se basa en el contrato de concesión suscrito en 2013 entre el MTC y Lima Airport Partners (LAP), específicamente en la adenda N.º 6.
Ante esta situación, la congresista Norma Yarrow envió un oficio al titular del MTC expresando su preocupación por el impacto económico que esta tarifa tendrá sobre los pasajeros que solo hacen escala en Lima, quienes deberán asumir un costo adicional sin utilizar todos los servicios del terminal. La tarifa fue oficializada a través de la Resolución N.º 041-2025-PD-Ositrán, y ha sido duramente cuestionada por lo que representa, según Yarrow, una suerte de “peaje” encubierto para los viajeros en tránsito.
El sector aerocomercial también ha reaccionado ante esta decisión. Varias aerolíneas han presentado un recurso de reconsideración ante Ositrán con el fin de revertir la resolución que establece el monto de la nueva TUUA. Argumentan que el cobro es injustificado y no responde a una evaluación técnica adecuada. Desde el Congreso se exige al MTC una explicación clara sobre los criterios que se usaron para aprobar la tarifa y si se analizaron las consecuencias económicas para los usuarios.
Carlos Gutiérrez, gerente general de la Asociación de Empresas de Transporte Aéreo Internacional (AETAI), criticó duramente a Ositrán por lo que considera una falta de rigor en la validación de los datos presentados por LAP. Afirmó que el regulador debió basarse en información financiera auditada y no únicamente en lo expuesto por la concesionaria. Para AETAI, esta tarifa no debió haberse incluido desde un inicio y representa una carga injusta para el usuario final.
A pocos días de su entrada en vigencia —programada para el 1 de junio, coincidiendo con el inicio de operaciones del nuevo terminal—, aún persisten dudas sobre cómo se aplicará exactamente esta tarifa. Aunque LAP tiene la facultad de iniciar su cobro, aún no hay un consenso con las aerolíneas sobre si este importe será incorporado directamente en el precio del boleto. Además, desde el gremio aéreo advierten que esta medida podría reducir la competitividad del aeropuerto Jorge Chávez frente a otros hubs regionales como los de Bogotá, Santiago de Chile o Panamá, que no imponen tarifas similares a los pasajeros en tránsito.