A finales de marzo, Emape inaugurará el puente peatonal Bethania, que conecta los distritos de El Agustino y San Juan de Lurigancho, un proyecto muy esperado por los vecinos de la zona. Esta nueva infraestructura, que cruza el río Rímac, está casi lista, con un 90% de avance, y cuenta con ciclovía, mejor iluminación y señalización. El Ministerio de Transportes y Comunicaciones ha aprobado la obra, según lo confirmado por Stephanie Moller, gerente de Mantenimiento de Puentes de Emape.
Moller destacó que el puente tendrá un ancho de aproximadamente 4 metros, lo que permitirá un mejor acceso para personas en silla de ruedas, y ofrecerá mayor comodidad tanto a peatones como a ciclistas, especialmente dada su exposición al caudal del río Rímac. “Este diseño mejorado facilitará la circulación de todos los usuarios, garantizando mayor comodidad y seguridad”, afirmó.
La nueva infraestructura también contará con un sistema de iluminación led en los arcos, lo que mejorará la visibilidad y seguridad para quienes transiten por el puente. Asimismo, la señalización vial será reforzada, lo que, según Moller, ayudará a prevenir accidentes. «Con estas mejoras, esperamos que los usuarios se sientan más seguros al cruzar», añadió.
Además, el proyecto incluye la recuperación de áreas verdes, la rehabilitación de un parque cercano y el mejoramiento de las veredas. Estas mejoras no solo beneficiarán a quienes utilicen el puente, sino también a toda la comunidad, proporcionando espacios más accesibles y agradables para todos.
Para garantizar la durabilidad y estabilidad del puente, Emape ha instalado más de 500 metros lineales de enrocamiento en la zona de cimentación. Esta medida está diseñada para proteger la estructura frente a los aumentos en el caudal del río Rímac, especialmente durante las lluvias intensas, asegurando que el puente mantenga su firmeza y seguridad a largo plazo.
Aunque la nueva infraestructura ofrecerá mayor seguridad, algunos vecinos han expresado su preocupación por el desmontaje del antiguo puente de madera, que tiene más de 40 años. Este puente, aunque de riesgo, es considerado por algunos como una alternativa valiosa. La Municipalidad de Lima ha reiterado que, una vez inaugurado el nuevo puente, el antiguo será desmontado debido a su deterioro y el riesgo de colapso. Sin embargo, algunos residentes, especialmente adultos mayores, han solicitado que se mantengan ambas opciones, ya que el nuevo puente podría implicar un desvío adicional de 10 minutos. A pesar de las advertencias de las autoridades, algunos vecinos siguen pidiendo que el viejo puente permanezca operativo para facilitar el acceso a la zona.
