Perú se encuentra en una posición estratégica para expandir su presencia en el mercado asiático, con proyecciones de ventas de productos agrícolas que podrían alcanzar los 50,000 millones de dólares. Esta ambiciosa meta se sustenta en la puesta en marcha del megapuerto de Chancay y la ejecución de cuatro importantes proyectos de irrigación en la costa peruana, según declaraciones del Ministro de Economía y Finanzas, José Arista.
El potencial del mercado asiático para absorber esta producción agrícola es clave, y para ello se necesitará habilitar más tierras con capacidad agrícola en la costa peruana. Los proyectos de Majes, Chavimochic, Chinecas, y Alto Piura, que suman alrededor de 200,000 hectáreas, son fundamentales en este sentido. Estos proyectos no solo aumentarán la producción de alimentos, sino que también generarán un significativo número de empleos, contribuyendo así a reducir el desempleo en el país.
El megapuerto de Chancay jugará un papel crucial en esta expansión hacia el Asia, facilitando el desarrollo económico no solo de la costa, sino de todo el Perú. La reducción en el tiempo de traslado de la mercadería hacia China, que podría ser de hasta dos o tres semanas, posiciona a Perú como un importante actor en el comercio internacional. Además, la posibilidad de atraer inversiones privadas y promover la creación de una zona económica especial en la zona norte de Lima representa un impulso significativo para la economía peruana en los próximos años.