El Aeropuerto Internacional de Chinchero en Cusco enfrenta retrasos en su construcción y en el proceso de adjudicación para operación y mantenimiento. La Corporación Peruana de Aeropuertos y Aviación Comercial (Corpac) podría asumir la administración si no se resuelven los obstáculos. Aunque se anunció la asignación a ProInversión para la promoción de varios aeropuertos, incluyendo Chinchero, por más de US$ 550 millones, la firma formal del convenio con el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) aún está pendiente. La decisión de la concesión de Chinchero como un proyecto independiente o parte de un paquete de aeropuertos está siendo evaluada por el MTC.
José Salardi, presidente ejecutivo de ProInversión, mencionó que se está considerando la posibilidad de una Iniciativa Privada Autofinanciada (IPA) para Chinchero, pero la decisión final recae en el MTC. A pesar de los retrasos, Salardi asegura que avanzarán con la adjudicación una vez reciban la responsabilidad del proyecto. La fecha original de finalización de la construcción en julio de 2025 se está reconsiderando con un nuevo cronograma «acelerado» para marzo de 2026. Consultores sugieren que la operación independiente de Chinchero es preferible dada su naturaleza autofinanciada y atractivo para operadores, en comparación con otros aeropuertos.
En la Comisión de Transportes y Comunicaciones del Congreso, se discutieron los retrasos del proyecto de Chinchero, atribuidos a diferencias internas y a un progreso de obras significativamente inferior al planificado. Aunque se evalúa un nuevo cronograma, la situación con el contratista Consorcio Natividad, en incumplimiento, genera preocupaciones sobre la finalización de la obra antes de marzo de 2026. La puesta en funcionamiento del aeropuerto de Chinchero es un tema de inquietud, y los participantes resaltan las circunstancias coyunturales que podrían afectar el avance del proyecto.
