En el marco de la Política Nacional Multisectorial de Seguridad Vial, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) está desplegando esfuerzos significativos para mejorar la seguridad vial en zonas escolares en colaboración con las municipalidades provinciales. Uno de los ejemplos más destacados es la asistencia técnica proporcionada a la Municipalidad Provincial de Huaral, donde se están implementando acciones concretas para proteger a los estudiantes en su camino hacia y desde la escuela.
La Municipalidad de Huaral ha estado trabajando diligentemente en proyectos de mejora y actualización de vías, así como en la instalación de dispositivos de control de tránsito en las áreas cercanas a las escuelas. Esto tiene como objetivo primordial prevenir siniestros viales en espacios donde la población más vulnerable, los niños y adolescentes, se desplazan diariamente. La colaboración entre el MTC y la municipalidad local ha sido fundamental para garantizar que estas acciones se desarrollen de manera efectiva y con un enfoque integral en la seguridad de los estudiantes.
La Dirección de Seguridad Vial del MTC no solo brinda asistencia técnica en la elaboración de planes y proyectos de seguridad vial, sino que también trabaja en la optimización y garantía de la implementación efectiva de estas iniciativas. En el caso específico de Huaral, se han revisado detalladamente los planos y se han propuesto mejoras como la ampliación de las zonas escolares a intervenir y la implementación de dispositivos como cruceros, rampas peatonales y reductores de velocidad. Estas acciones son vitales para crear entornos seguros y reducir la incidencia de accidentes de tránsito en las proximidades de las escuelas.
La colaboración interinstitucional y la coordinación entre los equipos técnicos del MTC y la Municipalidad Provincial de Huaral son clave para el éxito de estas iniciativas. Ambos grupos de trabajo están comprometidos en la búsqueda constante de medidas que contribuyan a reducir la tasa de muertes y lesiones por siniestros de tránsito. Este enfoque integrado, respaldado por programas nacionales y el compromiso de las autoridades locales, es fundamental para crear entornos escolares seguros y proteger la vida de nuestros niños y jóvenes.
